Una vez tienes la invención, lo ideal sería registrar la patente. Este proceso es recomendable para tener los derechos totales sobre dicha invención como propiedad industrial. En muchas ocasiones, es imprescindible contar con un abogado de patentes. Si crees que se trata de una idea con gran potencial y de la cual puedes obtener gran rentabilidad, averigua cuánto cuesta patentar una idea y ve a ello. Antes de crear una empresa y promocionar tu producto o idea, es necesario patentar la idea para evitar problemas legales en el futuro.
Descubre cuánto cuesta patentar una idea
Antes de conocer cuánto cuesta patentar una idea, hay que tener en cuenta que estos gastos no son sólo monetarios, ya que existe un tema burocrático que en muchas ocasiones es mejor delegar en profesionales, los cuales te asesorarán y gestionarán todos los trámites.
En Tecnopatent somos expertos en registrar una patente y ofrecemos el mejor asesoramiento de la mano de nuestros agentes totalmente cualificados, además de:
- Trabajo garantizado por un Agente Oficial de la Propiedad Industrial
- Asesoramiento para determinar si cumple con los requisitos para patentar
- Posibilidad de firmar un acuerdo de confidencialidad
- Máxima agilidad en las gestiones encomendadas
¿Cuánto cuesta patentar una idea, una marca o una patente? Nuestras tarifas
Para determinar cuánto cuesta patentar una idea, hay que tener en cuenta: en primer lugar si lo que queremos registrar es una patente, modelo de utilidad o una marca (descubre cuánto cuesta registrar una marca) y en segundo lugar, si el registro quiere realizarse a nivel nacional, europeo o internacional, lo cual hará que el precio varíe.
Disponemos de una sección en la que encontrarás un desglose con las diferentes tarifas de nuestros servicios. Para cualquier consulta, puedes ponerte en contacto con nosotros ya sea por email, formulario o teléfono y gestionaremos con rapidez y eficacia tu consulta para ofrecerte, sin ningún compromiso, una investigación de la viabilidad del registro que nos solicitas así como los plazos con los que trabajamos.